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En este artículo, al igual que en todos los anteriores, la prioridad es poder compartir conocimiento sobre al arte de la seducción, aprendiendo cada día un poco más sobre este interesante tema que a todos nos gusta.

Como la idea es que tengamos un aprendizaje mutuo, hoy no solo me enfocaré en el tema principal que es conocer la historia del arte de la seducción, sino que además también estaremos atendiendo las inquietudes que una seguidora me manifestó por correo electrónico.

Remontándonos a la historia de la humanidad, debemos aclarar una gran verdad: en tiempos primitivos todo se imponía por la fuerza, y por lo tanto, los hombres tenían una gran ventaja sobre las mujeres.

El detalle en ese contexto está en que por mucha fuerza que pueda tener el hombre, siempre, desde tiempos remotos, hemos tenido una debilidad: el sexo. Y en ese particular, la mujer, desde siempre, ha tenido la oportunidad de jugar con ese factor para sacarle provecho.

Sin embargo, conforme fue pasando el tiempo, varias mujeres comenzaron a desarrollar técnicas que hoy en día se siguen utilizando a pesar de haber transcurrido cientos o miles de años. Esas técnicas de seducción femenina comenzaron con la apariencia física, cuando por primera vez la mujer se dio cuenta de que a través de su figura, de los atuendos y el maquillaje, podía jugar con la mente del hombre, con sus fantasías y con sus más profundos deseos.

Hoy en día, una mujer que sabe lo que un hombre desea, puede jugar con su apariencia física para darle lo que él de sea, y a cambio, lograr que él haga lo que ella quiera.

Desde tiempos inmemorables, la mujer logró que el hombre dejara de interesarse por ambiciones de guerra y comenzara a compartir más con ella, en cosas más humanas, menos viles, y mucho más interesantes desde la óptica femenina. Fue allí cuando comenzamos a ver a grandes emperadores asistir a obras de teatro acompañados de sus esposas, y de la misma manera hoy en día vemos a presidentes de diversos países acompañando s sus esposas a obras benéficas.

Ahora, ya que hemos hablado de cómo surgió el mundo de la seducción y hemos dado un breve paseo por la historia y por la óptica femenina, es momento de que nuestro aprendizaje se profundice dando respuesta a la inquietud que nos manifiesta una seguidora de la cual no revelaré la identidad por motivos de discreción.

Ella nos comenta que es divorciada y que está con muchos deseos de conocer y salir con un hombre amoroso. Ella también nos relata en su correo que hace un año se encontró con un ex compañero de clases en Facebook, quien al ver su perfil la reconoció y le escribió. Ellos, según nuestra amiga, se escribían todos los días, y fueron desarrollando una relación a distancia.

Ella comenta además que planeaban verse en persona, ambos están en países muy distantes uno del otro. El detalle es que el sujeto en cuestión dejó de escribirle sin razón aparente, ya no le responde ningún mensaje a pesar de estar conectado en sus redes sociales, y ante tanta incertidumbre ella se siente desesperada y nos pide que la aconsejemos.

Lo primero que le puedo decir a nuestra amiga es que es cierto que las redes sociales pueden ser una herramienta muy útil, pero no las debemos emplear para contarlo todo y mantener una relación netamente por mensajes de texto donde no existe contacto físico.

Cuando hablas de todo por mensajes, cuando lo cuentas todo sin guardar nada para el momento del encuentro en persona, definitivamente pierdes el misterio.

Ahora, ¿Cómo recuperar el interés de ese hombre que tanto te gusta pero que dejó de escribirte por Facebook de la noche a la mañana?

Simple, utiliza tus redes sociales, no para buscarlo, sino para que publiques cosas de ti, de lo bien que estás, sube fotos donde te veas hermosa, trata de lucir elegante, sexy pero no vulgar. Yo estoy seguro de que tú como mujer sabrás sacarle mejor provecho a las redes sociales a partir de este momento.

Por ahora, no me queda más que desear que estos consejos te hayan sido útiles y que hayas aprendido algo nuevo sobre la historia del arte de la seducción. Si tienes algún comentario, por favor no dudes en compartirlo con nosotros.

Deseándote lo mejor se despide tu amigo,

Luis E
Director
Cómo Enamorar a un Hombre Hoy

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5 consejos que te ayudarán a pasar la página y seguir adelante

Todos hemos afrontado una ruptura amorosa en algún momento de nuestras vidas, sin embargo, sabemos que en ocasiones puede ser una situación muy difícil de superar por diversas razones, ya sea que esa persona era muy especial para nosotros o porque la ruptura se dio por algún motivo muy desagradable.

Las rupturas amorosas, como ya lo hemos descrito en otros artículos, pueden darse por varios motivos, los tres principales suelen ser:

1. Se acabó la pasión.
2. Hubo una fuerte discusión.
3. Se llegó a un mutuo acuerdo.

Una vez que la ruptura se da, es importante que seamos lo suficientemente fuertes e inteligentes para poder analizar la situación y tomar la decisión más apropiada, bien sea que nos dediquemos a intentar recuperar a nuestro amor (en caso de que la falta haya sido nuestra) o que entendamos que lo mejor es pasar la página y superarlo.

Sea como sea, una ruptura amorosa representa el fin de algo que en algún momento fue especial para nosotros, por eso a continuación te presentamos cinco consejos que te ayudarán a afrontarlo de la mejor manera:

• Vive el despecho pero no lo prolongues:

Es bueno tomarse un tiempo para vivir el despecho, al final de cuentas una ruptura amorosa es algo que nos afecta emocionalmente y lo más apropiado es drenar la tristeza que ello nos pueda causar. Sin embargo, no es sano permanecer demasiado tiempo en esa situación, por lo que lo recomendable es pasar un día entero a solas, pedir un día libre en el trabajo si lo creemos conveniente, llorar si lo consideramos necesario, recordar los momentos que pasamos junto a esa persona y tratar de no olvidar las cosas buenas que nos trajo esa relación. Pero luego recordar que la vida sigue y que debemos afrontar las cosas aunque parezcan difíciles.

• Valórate:

Una vez que ya hemos llorado la ruptura, es momento de olvidarse de despechos y dedicarnos a continuar con nuestras vidas. Para ello recomendamos reflexionar acerca de quiénes somos, de las cosas positivas que nos caracterizan, y dedicar un tiempo a consentirnos a nosotros mismos, ya sea yendo a un spa, inscribiéndonos en una gimnasio, o haciendo cualquier actividad que nos haga estar y sentirnos mejor por dentro y por fuera.

• Cambia las rutinas:

En algunas relaciones amorosas las parejas llegan a realizar actividades cotidianas juntos, actividades que luego podrían deprimirnos al hacerlas a solas después de la ruptura. Lo que te recomendamos es que te atrevas a salir de la rutina, almorzar en lugares diferentes a los que acostumbrabas frecuentar con tu ex, y cosas por el estilo. Atrévete a hacer cosas diferentes y verás que explorar nuevas rutinas te distraerá.

• Frecuenta nuevos círculos:

Así como las actividades y los lugares pueden recordarnos a nuestros ex, también lo pueden hacer los amigos en común. No decimos que dejes de visitar a los amigos que frecuentabas con tu ex, pero sí que te atrevas a conocer y socializar con nuevas personas cuyos temas de conversación te hagan pensar en otras cosas.

• Emprende nuevos proyectos:

Siempre hay alguna cosa que hemos querido hacer pero no hemos tenido el tiempo o la oportunidad. Una ruptura amorosa puede significar el momento apropiado para emprender un nuevo proyecto que nos mantenga la mente ocupada en algo positivo como iniciar un nuevo curso, emprender un negocio o realizar un viaje.

Daniel Ramones
Escritor y profesor universitario de Castellano y Literatura.

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